29 de abril de 2012

[Análisis] Raving Rabbids: regreso al pasado




Junto a Krower hemos estado viciándonos a este simpatiquísimo juego en el que los conejos más gamberros de los videojuegos se meten dentro de una lavadora y viajan a distintas épocas de nuestra historia para liarla parda, con todas las letras.


Podremos jugar hasta 4 personas, empezando con nuestro Rabbid en un museo, desde donde podremos personalizarle y elegir las distintas áreas (carreras, disparos, habilidad, plataformas o arcade), donde tendremos a su vez, distintas pantallas que deberemos pasar, a veces en modo cooperativo o competitivo. Dependiendo de que equipo gane (naranja o morado) se cambiará o no el curso de la historia, desbloqueándose nuevos trajes y áreas de cada sección. También tendremos un ranking donde podremos ver las mejores marcas conseguidas, todo ello con escenas de lo más tronchantes. 


Aparte de las secciones, tendremos una serie de minijuegos aparte a los que podemos jugar siempre que queramos e intentar establecer todo un récord (baile, canto...). Dependiendo también de nuestras acciones y del modo de explorar cada pantalla iremos desbloqueando una serie de logros, que podremos consultar en el sótano del museo.

Necesitaremos usar el Nunchuk para poder jugar y no se hace especialmente largo (en algunos momentos los controles se hacen especialmente difíciles e imprecisos), al contrario, completar todas las pantallas no llevará demasiado tiempo. Eso sin duda si lo llevará desbloquear todos los extras que tiene y conseguir los distintos logros.

Y no, no hay rastro de Rayman para los interesados. Nosotros no obstante no hemos completado aun todo el juego, aunque ya hemos alterado la historia en todas las pantallas que salen reflejadas. Cuando completemos más, ya lo comentaré por aquí.

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