13 de octubre de 2014

[Crítica] Predator: 1718 (1996)



Supongo que si sois mega fans de la saga Depredador sabréis por donde van los tiros con semejante título. Os daré una pista: 1718 nos da una idea del argumento del cómic que os traigo hoy e incluso sobre la identidad del cazador que aparecerá en él. Aunque no es el número exacto que apareció en cierta película de Depredador sí es muy aproximado por razones lógicas.

¿Seguís sin caer? ¿Y si os hago recordar Depredador 2 de la cual escribí su correspondiente reseña no hace mucho por aquí? Iros al final de la peli, cuando Harrigan ya ha derrotado a City Hunter (o Ghost, como prefiráis) y han aparecido el resto de sus compañeros. El viejo Depredador le entrega un regalo como señal de respeto, esta pistola:




¡Ajá! Ahora sí, ¿verdad? Supongo que todos, cuando visteis esta imagen, pensasteis que el amigo era más viejo que Matusalén y acto seguido os pusisteis a imaginar cómo se habría ganado la pistola de marras. ¿Qué me imaginaba yo? Pues algo similar al resto de películas; el cazador mata a cierto número de personas de una ciudad y hay un humano que destaca y le hace frente. Finalmente entablan un duelo pero sale perdiendo el humano, por lo que Greyback recoge el arma como recuerdo de un combate épico.

Pues con Predator: 1718 publicado como número único por Dark Horse Comics en 1996 nos explican la historia y no se parece en nada a lo que había imaginado.

El tal Raphael Adolini (aunque nunca le nombran como tal) resulta ser un capitán pirata que vive un motín al no querer aceptar un tesoro que han robado a un hombre de Dios. Por ello sus tripulantes intentarán matarle pero en medio de la refriega se meterá un Depredador al que llaman "el Diablo" o "Ángel Dorado"... que no será otro que un Greyback más joven, cabe deducir.

No quiero spoilear lo que ocurre exactamente por si tenéis el cómic y queréis leerlo, pero sí tengo que comentar que Raphael se ganará el respeto de "Ángel Dorado", recibiendo el arma que a partir de entonces llevará consigo.

No sé si ésta era exactamente la idea que tenían los guionistas de Depredador 2 sobre el crear una historia a partir del hecho de la pistola con Harrigan sobre una época en la que no existieran las armas de hoy en día para luchar y que un Depredador se diera un garbeo por esa época.

Corto, sin apenas diálogos pero con un dibujo bastante bonito... me ha gustado, aunque como siempre me quedo con ganas de más, pero eso ya será para otro día y con otra historia diferente.

1 comentario: