Supongo que ignorabais - o no - las ganas tremendas que tenía a este juego con lo que adoré a su predecesor, Limbo. Playdead nos ha hecho esperar seis años para que pudiéramos disfrutar de su segundo título, anunciado hace bastante tiempo sufriendo retraso en su momento, prolongando así la agonía de los que lo aguardábamos con impaciencia.
Finalmente este mes de julio nuestra espera llegó a su fin pero yo he tardado un poquito más en saborearlo, evitando como siempre mirar cualquier tráiler, gameplay, análisis, etc que pudiera haber por la red para que la sorpresa fuera máxima (aunque al final no me pude resistir a ver los primeros 30 min. de un gameplay, lo que hizo que lo quisiera jugar aún con más ganas).