12 de octubre de 2012

[Análisis] Angry Birds


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¿Quién no conoce o ha oído hablar de este título? Angry Birds se ha hecho muy conocido desde su lanzamiento en 2009 por Rovio, una empresa de móviles finlandesa. Es el juego más vendido para móviles de la historia y del que se han hecho ya múltiples versiones e, incluso, comercializando todo tipo de merchandising. 

¿Pero cómo se ha hecho tan popular? ¿Dónde reside el encanto de Angry Birds? Sin duda, se debe a su jugabilidad que, a pesar de ser bien sencilla da lugar a todo tipo de niveles a cada cual más complicado que el anterior, sobre todo si queremos hacer el máximo de puntos para conseguir las 3 estrellas como condecoración.


Para ello el jugador manejará hasta 8 tipos de pájaros distintos (dependiendo de la edición pueden ser más o menos), cuya meta es recuperar los huevos que les han robado unos cerditos de color verde que, para protegerse, se esconderán en edificaciones que habrá que destruir. Esto se hará a lo largo de múltiples niveles cuya temática variará conforme avancemos: los paisajes pueden ir desde el campo, la selva, al lejano oeste o bajo tierra.
Lo más divertido es, sin duda, que deberemos romper cosas; cuanto más destruyamos más puntos nos darán en cada nivel, pero para poder pasar de pantalla deberemos destruir a todos los cerdos que haya en el nivel con el número de pájaros que nos dan. Ardua tarea, pues cada ave funciona de una manera distinta, hay materiales más resistentes que otros y el terreno y elementos no siempre ayudan en nuestra misión.


También recibiremos puntos extra si rompemos determinados objetos que hay en el nivel; picos, cristales, patitos de goma, globos y los propios materiales pueden ayudarnos a inflar nuestra puntuación si sabemos aprovechar bien nuestros pájaros. Aunque también tendremos en cuenta que si nos sobran y hemos matado a todos los cerditos, cada pájaro nos dará 10.000 puntos extra.

En el menú podremos elegir cuál grupo de niveles queremos jugar; dentro de cada uno de ellos hay hasta 4 grupos de niveles (cada grupo contiene 21 pantallas diferentes) para empezar, aunque deberemos ir consiguiendo estrellas para ir desbloqueando el resto.
En determinados niveles también tendremos que recoger unos huevos dorados para así desbloquear nuevos niveles especiales, algo más difíciles que el resto y en los que conseguiremos una estrella más si alcanzamos la puntuación deseada.



Como ya he dicho, hay hasta 8 tipos de pájaros aunque no podremos elegirlos nosotros mismos, sino que cuando empiece el nivel los tendremos en fila ante el tirachinas para ser usados en ese mismo orden, imposible de cambiar. Por lo tanto, deberemos usarlos sabiamente y teniendo en cuenta que sólo dispondremos de esos para matar a los cerdos.

Cada pájaro tendrá una habilidad especial que se activará una vez que esté en vuelo y clickeemos con nuestro ratón. Así habrá pájaros bomba, pájaros ladrillo y pájaros boomerang, cada cual ideales para ciertos materiales. Por su parte los cerdos pueden ir sin nada o con cascos y sombreros, que les protegerá de los impactos y les harán más difíciles de derribar. Al principio cuesta pero una vez que hayamos pasado varios niveles y con ayuda de la presentación que se nos muestra cuando empezamos a usar un nuevo pájaro lo iremos haciendo cada vez mejor.
La forma de tirar es también importante, pues podremos apuntar en determinado ángulo y dar más o menos fuerza a nuestro lanzamiento.

Rovio ha ido sacando distintas versiones del clásico, como Angry Birds Seasons enfocado a fechas importantes del año como San Valentín o Navidad. Angry Birds Rio fue lanzado en 2011 para promocionar la película Río, que tiene como protagonista a un lorito azul llamado Blu. Además ha sido adaptado para plataformas distintas a los móviles, como PC, Xbox 360, PS3... y hace unos días escasos se anunció el nuevo Angry Birds Star Wars, donde conserva su modo de juego pero con un lavado de cara para cerdos y pájaros.


Sin duda los chicos de Rovio saben exprimir como nadie su título, famoso en todo el mundo y realmente adictivo por su modo de juego. Aunque pueda hacerse repetitivo porque siempre es igual en todas sus versiones evitan que así parezca con los cambios producidos en el diseño y comportamiento de pájaros, cerdos y entorno.

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